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El movimiento de un colectivo que baila quieto

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De izq. a der.: Loza, Rivero, Bonilla y Campodónico. Foto: Matilde Campodónico

Campo presenta su Tambor del cosmos, hoy en El Galpón.

Se podría pensar en palabras como evolución, inquietud o innovación para tratar de definir al colectivo musical Campo, pero si hubiera que elegir una sola, la que le calzara mejor, seguramente sería movimiento. Desde que este proyecto se puso en marcha como una iniciativa del costado productor de Juan Campodónico, hasta ahora que la idea colectiva se ha desarrollado mucho mejor integrando completamente a Verónica Loza, Martín Rivero y Pablo Bonilla al núcleo central, todo ha ido avanzando.

Ese movimiento definitorio está en su música, que en un primer disco homónimo se aferró fuertemente a la cumbia digital, que después pasó por una fase de "rarezas" y que, para este Tambor del cosmos —un título que tiene la actividad universal, la circulación de energía implícita—, se expande a distintos territorios pero siempre con un punto en común: una pulsión bailable constante.

Y también está en las letras, sobre todo en las de este disco. El ejemplo más claro es, de hecho, el del corte de difusión, "Bailar quieto", que resume muy bien la impronta sonora y estética de Campo, pero también la de ese público uruguayo genérico al que generalmente le cuesta entregarse al ritmo.

Si no puede ver el video, haga click aquí.

"Tambor del cosmos", cantada por Gustavo Santaolalla; "Huracán" o "Duerme agua", por mencionar otras, refuerzan ese concepto que define a este colectivo electrónico, que se esfuerza por traer una propuesta diferente a la escena local y que mantiene una evolución cíclica, como buscando ir siempre hacia sus propios límites, para trascenderlos y ver a dónde pueden llegar.

El movimiento de Campo lo lleva hoy a las 21:00 al Teatro El Galpón a presentar formalmente Tambor del cosmos, un disco que ya tuvo al grupo en México y que este fin de semana lo llevará a Buenos Aires. En vivo, completarán el equipo Luciano Supervielle, Lucía Torrón y Gabriel Casacuberta (los tres grabaron en el disco), además de Emilio Acosta, de la banda Atlas que es el otro proyecto de Martín Rivero. Quedan entradas en venta en Tickantel y en boletería de la sala, desde 550 pesos.

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De izq. a der.: Loza, Rivero, Bonilla y Campodónico. Foto: Matilde Campodónico

MÚSICABELÉN FOURMENT

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